La Junta de Andalucía desmantela su oficina turística en las dos ciudades de Úbeda y Baeza

La administración autonómica toma la drástica decisión de trasladar a sus trabajadores provocando un empeoramiento en el servicio que se presta a los visitantes

Francisco Javier Lozano, Elena Rodríguez, durante su intervención.
Francisco Javier Lozano, Elena Rodríguez, tras su intervención.

La concejala de Turismo, Elena Rodríguez y el diputado provincial de Turismo, Francisco Javier Lozano, han expresado su preocupación respecto a las recientes decisiones tomadas por el Gobierno de la Junta de Andalucía en materia turística y que afectan directamente a la ciudad de Úbeda y el servicio que se presta a los visitantes desde su Oficina de turismo.

Concretamente, han denunciado el desmantelamiento de la Oficina de Turismo, responsabilidad de la Junta de Andalucía, en las dos ciudades Patrimonio de la Humanidad, y el traslado de sus trabajadores. “Estamos perplejos ante esa situación de cierre de nuestra Oficina de Información Turística de la Junta de Andalucía. Incluso, su propio personal, se ha enterado a través de este Ayuntamiento antes que la administración autonómica, de que van a ser trasladados a la oficina de Jaén”, ha señalado Rodríguez.

La edil ha recordado que desde el año 2016, existe un convenio de colaboración en el que el personal de la Junta de Andalucía y el personal técnico del Ayuntamiento comparten espacio en las dependencias de las antiguas carnicerías, con el objetivo de dar un servicio más eficiente al visitante que se acerca a la ciudad.

No obstante, a pesar de estas circunstancias y el trabajo que se ha realizado conjuntamente, el pasado 27 de diciembre solicitan el correo de la concejala responsable de turismo y convocan al personal de la oficina de la Junta de Andalucía a las 13:00 horas. En el escrito que se remite a la responsable de turismo le informan desde Turismo Andaluz el cierre de esta oficina y el traslado de sus trabajadores a Jaén alegando “una restructuración de todo el servicio”.

Los datos reales contradicen las afirmaciones de ineficiencia de la oficina de turismo, demostrando un aumento del 64% en el número de visitantes durante el último puente de diciembre en comparación con el año anterior. “Úbeda y Baeza siguen progresando y son esenciales en el modelo turístico, respaldados por las opiniones positivas de los turistas que visitan estos destinos”, ha destacado la edil.

Rodríguez ha recordado que organismos como el Ayuntamiento de Úbeda no reciben financiación por parte de la administración autonómica por la denominación de Patrimonio de la Humanidad. “En otras ciudades Patrimonio Mundial disponen de consorcios o patronados, a través de los que reciben ayudas para mantener y rehabilitar el patrimonio o para el desarrollo turístico y económico”.

“Estamos viendo que no solamente no nos dan ni una sola ayuda, sino que nos está desmantelando los pocos servicios que teníamos históricamente. Va a suponer un perjuicio para la ciudad de Úbeda, ya que va a costar muchísimo poder abrir todos los días del año. Los ayuntamientos tenemos los recursos limitados y esto supone, no solamente que perdamos dos personas en la oficina de turismo, sino que perdamos la aportación del convenio que, en la reunión mantenida en la mañana de hoy con la dirección de Turismo Andaluz, han dicho que van a renovar un año, solamente con la aportación económica como paliativo durante el 2024. No obstante, después no va a haber prórroga ninguna, ya que todo el personal se va a trasladar a la capital”, ha anunciado la representante municipal.
No obstante, ha aprovechado para poner en valor el trabajo y la colaboración que llevan a cabo desde la Diputación Provincial. Actualmente, ambas administraciones disponen de un acuerdo de colaboración nominativo y plurianual con las ciudades Patrimonio de la Humanidad de la provincia, con una inversión pública directa que supera los 350.000 euros para los ayuntamientos y otros 40.000 euros para los empresarios, representando una inversión cercana a los 400.000 euros. Esta inversión ha supuesto un impacto positivo significativo en visitantes y turistas y ha generado un alto índice de pernoctaciones en nuestra provincia.

Deterioro en la promoción
Mientras, han lamentado los responsables políticos, desde la administración autonómica se ha rebajado la financiación para los municipios turísticos del 10 por ciento al 8 por ciento. Tal y como ha explicado Lozano, en lugar de suponer un beneficio, desde la Junta están consiguiendo que tener esta categoría sea un problema. “Generan incompatibilidades de accesibilidad a otras subvenciones, cuando esto debería ser una denominación que diferenciase positivamente el esfuerzo que hacen los ayuntamientos”, ha dicho.

Asimismo, han denunciado que Fitur, el marco más importante a nivel nacional e internacional de promoción del turismo, se ha convertido para la Junta de Andalucía en un espacio donde potenciar prácticamente el sol y playa.
Lozano ha desgranado que el espacio que en esta ocasión han decidido dar un protagonismo “sobrenatural” a las capitales de provincia y 4 ciudades de más de 100.000 habitantes, consiguiendo así que toda la oferta de la que dispone Andalucía se desvirtúe.

De los 20 espacios de promoción, 12 serán de turismo urbano y de turismo de grandes ciudades, muchas veces masificado. “Han dado de lado a un turismo de identidad, interior, rural, cultural y de naturaleza”, ha lamentado.
“Úbeda y Baeza son el corazón y el motor turístico más importante de nuestra provincia junto al Parque Natural de Cazorla, Segura y Las Villas. Se trata de elementos diferenciadores de excelencia y de calidad que nos imprimen competitividad, por eso no podemos ni entender ni comprender esa discriminación que hace Moreno Bonilla a las ciudades de Úbeda y de Baeza y especialmente el consentimiento que está teniendo en esto la Consejería de Turismo y también Turismo Andaluz que justifican su toma de decisiones en nimios argumentos que no tienen ningún criterio sólido a nivel de la perspectiva técnico turística”, ha denunciado Lozano.

Importancia histórica
Elena Rodríguez ha destacado la relevancia de la ciudad de Úbeda a nivel turístico y patrimonial a nivel nacional remontándose a la visita del ministro Fraga Iribarne en 1964. Durante su paso por Úbeda disfrutó en primera persona de los monumentos de la Plaza de Santa María, el Oratorio de San Juan de la Cruz, la Iglesia de San Pablo, la Casa de las Torres, callejeó por los barrios de San Lorenzo y Santo Domingo y se interesó por la artesanía ubetense.
Esta visita fue el catalizador para la apertura de la Oficina de Turismo de Úbeda el 2 de enero de 1965, ubicada en el Palacio Vázquez de Molina. En esa época, el director general de promoción de turismo, destacó el aumento de oficinas de turismo en las capitales provinciales y ciudades importantes, respondiendo a las directrices del ministerio y subsecretario de turismo.

“Como parte de la privilegiada España se encuentra Úbeda, que encierra por cada metro cuadrado un caudal insospechado de cultura y arte. Este arte no queremos guardarlo, sino mostrarlo al visitante como hombres de corazón que somos. El turismo es también obra de misericordia, por la que tiene de espiritual y por cuanto sirve para fomentar las relaciones humanas”, afirmó el subsecretario de Turismo, Rodríguez Acosta.

Por otro lado, las crónicas de la Revista Úbeda hablan de la reciente inauguración como un espaldarazo oficial a la calidad artística monumental de nuestra ciudad. “Empieza a ser reconocida en todo el ámbito nacional. La inauguración de la oficina de turismo marca un hito decisivo. Desde ahora la importancia turística de la ciudad en ritmo creciente obliga a todos los ubetenses a un interés especialísimo basado en el conocimiento consciente de las virtudes y méritos de nuestro pueblo”, ha señalado la edil.

La inauguración de la oficina marcó un hito en la ciudad, respaldando su calidad artística monumental y obteniendo reconocimiento a nivel nacional. Desde entonces, Úbeda se ha destacado como un destino turístico relevante, marcando 58 años de servicio público ininterrumpido.

En 1984, con la transición a la democracia, las competencias de turismo se transfirieron a las comunidades autónomas. El Real Decreto 3585/1983 de 28 de diciembre de 1984 estableció este traspaso de funciones del Estado a la comunidad autónoma de Andalucía en materia de turismo. Esto incluyó la transferencia de catorce oficinas de información turística, dos de las cuales se encontraban en Úbeda y Baeza, reconociendo de esta manera la importancia de estos destinos como ciudades patrimoniales y turísticas.

Sin embargo, las acciones recientes del Gobierno de Andalucía, encabezado por el Presidente Moreno Bonilla y el actual consejero de Turismo, han mostrado un “desinterés evidente por el patrimonio cultural”.
“Esta rica historia y legado de Úbeda y Baeza como destinos turísticos emblemáticos están en peligro debido a esta falta de consideración hacia su patrimonio y su importancia turística”, ha enfatizado la edil.