Juan Ángel Gómez Cano no defraudó a los asistentes al Pregón del Costalero
A lo largo de su exposición hizo una firme defensa de la tradición en la Semana Santa ubetense y de su Magna Procesión General

Si altas eran las expectativas puestas en él, Juan Ángel Gómez Cano no defraudó a los asistentes al XXXI Pregón del Costalero celebrado en el convento de Santa Clara. En la antesala de la Semana Mayor de Úbeda congregó a un importante número de amantes del mundo cofrade y costalero.
La presentación correspondió a su esposa y compañera Chesca Martínez que elaboró una radiografía detallada del pregonero, especialmente de su personalidad, y fue tocando todos los aspectos de su vida. Se “colaron” en esta presentación sus dos hijos, Rodrigo y Cayetano, que aportaron un momento divertido toda vez que emotivo en la descripción de su padre.
A lo largo de su exposición hizo una firme defensa de la tradición en la Semana Santa ubetense y de su Magna Procesión General pero abriendo las puertas a los cambios e innovaciones que se han producido en las últimas décadas, alertando también de los peligros que él aprecia. No faltaron las denuncias de aquellos aspectos que no ve con buenos ojos y que consideran impropias del mundo cofrade.
Juan Ángel fue narrando así mismo sus inicios en las cofradías y en la Asociación de Costaleros, recordando divertidas anécdotas y compartiendo sus sentimientos acumulados a lo largo de los años de experiencia siendo los pies de Él y de Ella, de Jesús y de María. A ellos encomendó el cuidado de aquellos seres queridos que faltan ya en su vida y agradeció todo lo que la vida le ha regalado.
Finalizó el pregón con una exposición lírica que recorrió toda nuestra Semana Mayor y que fue aderezada con la interpretación al piano de su sobrina.
Con los ecos de sus palabras y los sonidos musicales, y con la imagen en la retina del Cristo de la Pasión que presidió el pregón, quedamos en disposición de iniciar una nueva Semana Grande vivida desde el trabajo silencioso, generoso y esforzado del costalero.